La ropa a prueba de fuego es un requisito vital para la seguridad en los sitios de construcción y en algunos espacios de trabajo industriales. La preservación de la vida útil de estas prendas es un requisito no sólo por la ley sino también por la seguridad del usuario. Este artículo examinará algunas de las maneras en que puede ayudar a extender el uso de sus prendas ignífugas y asegurar que su eficacia y fiabilidad se mantengan por más tiempo.
Conocer las telas ignífugas
La mayoría de las prendas resistentes al fuego se preparan utilizando tela que se trata con productos químicos o material que es inherentemente resistente al fuego. Es útil saber el tipo de tela que se utiliza en su prenda para fines de cuidado. Los materiales más utilizados son el Nomex, el Kevlar y el algodón tratado. Cada tipo de tela tiene instrucciones de cuidado que deben seguirse para evitar comprometer las características resistentes al fuego de las prendas.
Técnicas adecuadas de lavado
Las prendas que están hechas resistentes al fuego requieren un lavado y limpieza adecuados, este método de limpieza y lavado es uno de los elementos más importantes para mantener. Siempre consulte las etiquetas de cada fabricante para conocer sus métodos de lavado específicos. Sin embargo, generalmente se recomienda lavar la ropa resistente al fuego con agua tibia y un detergente suave. Es esencial evitar el blanqueador y los ablandadores de tejidos, ya que podrían reducir los elementos resistentes al fuego de la tela. Además, asegúrese de que las prendas se laven por separado de otras prendas para evitar la contaminación cruzada con otras telas.
Recomendaciones para el secado y almacenamiento
Una vez la ropa está lavada y limpia, el siguiente paso es secarla y este proceso es igual de importante. Es mejor evitar el uso de sopladores y secadores de aire, los secadores eléctricos pueden arruinar el material y aumentar las temperaturas innecesariamente. Si se considera el uso de un secador, intente ponerlo a fuego bajo. Una vez que las prendas estén completamente secas, es esencial almacenarlas en un lugar frío y seco, lejos de la luz solar y la humedad. El almacenamiento adecuado de prendas y prendas permite que el tejido se mantenga en estado y que se aumente la duración del uso.
Inspecciones intermedias y preajustes y reparaciones
La ropa resistente al fuego debe ser inspeccionada regularmente para garantizar su eficacia. Compruebe si hay signos de uso como hilos desgastados, rasgaduras menores, decoloración u otros defectos. El tejido en caso de bordes que se arrancan se puede reparar utilizando hilo resistente a la llama, sin embargo, si hay un agujero importante en el tejido, es preferible consultar a un experto. Revisar regularmente la ropa ayudará a evitar problemas relacionados con la seguridad.
cumplimiento de las normas de la industria
Cualquier prenda resistente al fuego debe cumplir con las estrictas normas determinadas por la industria, incluida la NFPA 2112 o el asado del tejido en la parte norte 65 1506. Los constantes cambios de las normas y regulaciones son actualizaciones. Las prendas son resistentes, y cumplen con los estándares requeridos. Se aplican medidas de seguridad regulares y se define el propósito de la variedad de prendas para que todos los trabajadores recuerden mantener su ropa de protección a fuego.
Conclusión
Mantener intacta su ropa protectora debe ser una prioridad para usted mientras trabaja en condiciones de alto riesgo. Se supone que el vestido de protección debe protegerte de las llamas, por lo tanto, debe mantenerse correctamente. Teniendo en cuenta las tendencias futuras, los avances en materiales y tecnologías junto con los estándares de la industria ayudarán a establecer el uso para una larga vida útil y un alto rendimiento.